Desde una casa con espejos escondida en el bosque hasta un iglú en pleno corazón de Tallin pasando por un molino de viento. Estonia propone una serie de alojamientos singulares para disfrutar de un primer viaje al destino báltico.
Conocido por tener uno de los aires más limpios del mundo según la Organización Mundial de la Salud, con una población de poco más de un millón y más de la mitad del país cubierto por bosques y pantanos, Estonia brinda la posibilidad de alojarse en espacios singulares que mostrarán al huésped toda la cultura y la naturaleza del país.
Molino de viento de Ohessaare
Ubicado cerca de los espectaculares acantilados de Ohessaare, en la península de Sõrve de la isla de Saaremaa, considerada la capital del spa de Estonia por su gran cantidad de spas, el molino de viento de Ohessaare es uno de los lugares más singulares para alojarse. La ciudad principal de Saaremaa, Kuressaare, está a poco más de una hora en coche, por lo que hay una combinación perfecta para los que quieran relajarse y hacer una excursión de un día a cualquiera de sus spas.
Con sus hermosas vistas al mar, el molino de viento Ohessaare es un lugar ideal para desconectar y recargar energías – aunque no tenga equipo eléctrico en su interior-. Los huéspedes pueden reservar una canasta de desayuno y comenzar el día con productos preparados directamente del horno, café y zumos recién exprimidos. En definitiva, ¡para sentirse super rural!
Camping en forma de barril
La cantera Rummu, a 45 km al suroeste de Tallin, data de la década de 1930. Originalmente utilizada como una institución penal, tanto la prisión como la cantera de los alrededores fueron abandonadas y la cantera se inundó. Todos los edificios industriales y los árboles quedaron sumergidos y se pueden ver mientras se navega por el lago. En la actualidad, la cantera se ha transformado en una zona de ocio, popular para nadar y bucear en verano y patinar en invierno.
Los visitantes pueden pasar la noche durmiendo sobre el lago de la cantera en una cápsula para acampar en forma de barril. Accediendo desde la tierra por un paseo marítimo pero flotando en el lago, los barriles en el Paekalda Holiday Center están situados en un área privada rodeada de bosque. La pared final de cada cápsula está hecha de vidrio y ofrece a los visitantes una hermosa vista del lago y las puestas de sol. Hay áreas comunes de barbacoa o, para aquellos que buscan relax, hay una sauna y una bañera de hidromasaje sobre el agua.
Dormir en un iglú en pleno corazón de Tallin
Iglupark reúne tres aspectos esenciales de la vida de una persona: trabajo, ocio y salud, en iglús bien pensados y definidos: Iglú oficinas; casa Iglú e Iglú saunas. Se trata de un concepto original de estancia en el corazón de la capital estonia, en el barrio de Noblessner, con vistas al mar y cerca del mágico centro de Tallin y su variada oferta de restauración y ocio. Además de poder alquilarse como iglú oficinas, alojarse en una casa iglú o disfrutar de una iglú sauna en compañía, en un bello entorno natural, será algo inolvidable del primer contacto con el destino.
Y todo ello en el mejor desarrollo urbano del Báltico, como así se ha reconocido al barrio de Noblessner, ubicado junto al mar y cerca del puerto de hidroaviones; y a unos minutos de PROTO Invention Factory, un centro temático para toda la familia, ubicado en la antigua fábrica de submarinos de Noblessner, que muestra la tecnología de ayer y de hoy junto con los inventos de la época de Julio Verne o de la Staaply Art Gallery, café y galería a la vez e ideal para tomarse un café entre obras de arte.
Casa del espejo de la posada de Riverbed
A dos horas en coche desde Tallin, se puede acceder fácilmente al Riverbed Inn, que ofrece una experiencia verdaderamente privada. El negocio familiar se concibió como un lugar donde lo hecho por el hombre se encuentra con el mundo natural. Situado en la campiña del oeste de Estonia, el Riverbed Inn es el lugar perfecto para un retiro relajante y romántico. Es un alojamiento donde los visitantes pueden estar totalmente tranquilos y disfrutar del paisaje.
El Riverbed Inn se ha construido con espejos en tres lados, lo que lo integra en su entorno y cuenta con una sauna estonia Iglucraft, que se hizo famosa cuando David Beckham y Gordon Ramsay instalaron una. Desde la posada también se puede visitar la ciudad costera medieval de Pärnu, a 45 minutos en coche. Uno de los 100 mejores destinos sostenibles de 2020 reconocidos por Green Destinations, la historia de éxito de Pärnu se apoya en una pradera costera protegida que se abre al público y es mantenida por vacas.
Villa natural Maidla
A 50 minutos en coche de Tallin, Maidla Nature Villa es una propiedad privada en medio de los humedales de Estonia. Los huéspedes podrán explorar un área de belleza natural intacta desde este moderno invernadero ubicado entre un bosque de abedules. Los propietarios se han esforzado por conservar el área manteniendo los árboles cercanos y fusionándose con los humedales, ayudando a los visitantes a admirar los alrededores de la mejor manera posible.
La villa está bien ubicada para explorar los pantanos deshabitados de Estonia. Cubriendo una quinta parte del país, constituyen una parte importante de la cultura y el folclore de Estonia. El amanecer y el atardecer son los mejores momentos para visitar, ya que la tenue luz hace que el área se sienta aún más misteriosa.